El desafío (necesidad)
Uno de nuestros clientes con mayor innovación dentro del mercado y líder en el sector farmacéutico y de consumo a través de la Distribución Farmacéutica y Desarrollo de Farmacias, requería mejorar los tiempos de sus proyectos, entregas con cronogramas, arquitectura y metodología ágil. Una solución permanente para poder dar prioridad a los procesos internos y tener equipos específicos y atender sus proyectos.
Con nuestro cliente iniciamos implementando nuestro producto de facturación electrónica, con un éxito tan rotundo, que encontraron en nosotros un proveedor de soluciones integrales IT, entre ellas la Fábrica de software, para impulsar sus proyectos con horas contratadas, con un flujo ordenado y proactivo.
La solución (implementación)
Ante el desafío expuesto anteriormente, Sipecom S.A presenta una propuesta de fabrica de sofware para atender los proyectos de el cliente, trabajando para atender bajo la modalidad de horas de fábrica. Contamos con todo el equipo para nuestra solución fábrica de sofware.
Actualmente nuestra fábrica de software la conforman más de 60 colaboradores epecializados en varios lenguajes de programación y metodologías ágiles, capaces de atender, soportar y trabajar los proyetos tecnológicos del cliente. Actualmente trabajamos en varios proyectos a la vez liderados por PM’S de nuestra fábrica el cual está encargado de manejar el proyecto integral y trabajar bajo un esquema de proyectos con tiempos de entrega, para que el producto final se entregue, con la arquitectura correcta, revisado, probado y con el funcionamiento óptimo en su puesta a producción.
Los beneficios
Obtuvo mayor rapidez y agilidad en el desarrollo ya que contaba con horas contratadas listas para su utilización, a la par que redujeron los costos operativos por contrato de recursos. Una de las novedades importantes fue la utilización del servicio de fábrica de software únicamente cuando lo solicitaban. También se maximizó la calidad de los trabajos entregados ya que los proyectos pasaban por toda la etapa de la fábrica (IDP, Arquitectura, desarrollo, QA, QC y soporte). Se redujo significativamente los procesos de inversión en equipos y un lugar físico para proyectos. Minimizó esfuerzos de operación, pues la participación del cliente se redujo a la validación de los procesos recibidos y su puesta en producción, así como también, los riesgos en el cumplimiento de los proyectos al tener un equipo exclusivo concentrado en su desarrollo.
Por último, al tener una responsabilidad por contrato, podían organizar mejor sus presupuestos, contacto con una planificación de costos que ayudó significativamente a mejorar tanto el lo administrativo y operativo.